Algunos de los reportajes que he publicado últimamente me han vuelto a transportar a Grecia, la inmortal, la mítica, de donde todos venimos. Vergina acoge la necrópolis real del padre de Alejandro Magno. oro, piedras preciosas, tumbas reales y majestuosidad. Hidra es la joie de vivre, la bohemia balanceándose en un barquito, las calles blancas y los burritos traqueteando.
También me he transportado a Verona, para descubrir a los lectores que esta ciudad es mucho más que la cuna del amor trágico de Romeo y Julieta. Aunque, claro, los dos amantes más universales son la atracción por antonomasia de esta ciudad que disfruta de las terrazas, los palacios y los aperitivos.
Espero que os gusten los reportajes, publicados todos ellos en Magazine de La Vanguardia. A viajar!